sábado, 10 de abril de 2010

TALLER PREVIO INTERVENCIONES URBANAS

Antes de plantearme el proyecto realicé un taller de intervenciones urbanas dos veces pensado para pacientes de 4-12 años, que creo es conveniente comentar como experiencia previa en este tema.
Objetivos:
Como meta crítica: realizar una intervención de tipo “urbana” en alguna cristalera del hospital. Tratando de enseñarles distintos tipos de intervenciones urbanas, que realicen alguna y luego que decore la vidriera de sus habitaciones.
Como meta creativa: sean capaces de imaginar y realizar algún tipo de intervención para una cristalera dentro del hospital.
Dentro del contenido (vital) autoseleccionado: estaría la intervención en las cristaleras de sus habitaciones.
Contenido crítico: dar la posibilidad de que puedan diseñar ellos mismos las diferentes maneras de intervenir los espacios, enseñándoles distintos tipos de intervenciones y artistas que trabajan con el tema a través de diversas maneras.

La Parte teórica:
La explicación la realicé con la ayuda de un Power Point ya que creo que es la mejor manera de mostrar imágenes.
En esta parte teórica se daba una breve definición de lo que es el arte en la calle (modificaciones en el entorno que nosotros mismos creamos para expresar o comunicar algo).
Ejemplifique con graffitis, pegatinas en las calles, intervenciones, todo muy generalizado. Sin dar nombres de artistas para no agobiar a los pacientes, porque suelen ser de 5-6 años y no retienen esa información y en cuanto escuchan algo muchas veces que les suena complicado desconectan, y eso si que no me interesa, prefería que se quedasen con la idea global.

La Parte Práctica:
Decidimos (mi compañera y yo) que el material más acertado para una primera aproximación eran los papeles de celofán, rotuladores y material hospitalario (que con esto conseguimos otros fines , como que se familiaricen con el material higiénico-sanitario y le pierdan el miedo). Aunque con este último decidieron no trabajar mucho, se decantaron por los rotuladores.

Conclusiones(escribo las conclusiones de forma literal, tal y como aparecen en el cuaderno de campo de Curarte):




Día 1:
Hoy en el hospital podíamos trabajar con Andrea (4 años) Álvaro (5años) y Antonio
(3 años); Andrea estaba esperando la ambulancia para irse a casa, cuando termino el ppt se marchó.
El ppt. Lo visionamos en la ciber aula, Álvaro y Andrea eran los pacientes, durante el mismo se mostraron interesados en las imágenes , sobre todo se quedaron sorprendidos del cambio de tamaño de las sombras de personas proyectadas en edificios y disfrutaron con las imágenes de las habitaciones de colores; pero los términos empleados en el mismo no eran adecuados para unos niños de esa edad, y quizás alguna imagen tampoco, como las que hacían juegos de palabras con los nombres de las estaciones de metro, no las comprendían.

Cuando comenzábamos a trabajar con Álvaro apareció Antonio, al ser tan pequeño, travieso y al quedarnos quizás bloqueadas con el resultado del ppt. no se lo mostramos, aunque si le explicamos en que íbamos a trabajar.
Durante la parte procesual Álvaro demostró gran interés , se esmeró mucho con los materiales, escogió un guante de látex inflado para dibujar una cabeza y en un trozo de papel celofán dibujó accesorios para el personaje que iba a instalar en la cristalera; Antonio por su parte trató de imitar todo lo que hacia Álvaro, pero de una manera mucho más tosca debido a su edad y a su afán de protagonismo, rompió 3 guantes intentando dibujar algo; al ver el pegamento de color solo quería trabajar con el por más que le insistíamos que no pintaba, que su función era simplemente pegar cosas, aun así conseguimos algún resultado.
Colocamos los resultados en la cristalera, por último añadimos un dibujo que hizo Álvaro con los digimarkers.
Les gustó el resultado de sus obras en las cristaleras.

Dia 2:
Hoy solo había dos niños con los que podíamos trabajar y ninguno podía salir de su habitación: Marcos y Álvaro.
Como Álvaro estaba desayunando y había que esperar a que terminase entramos ambas educadoras a la habitación de Marcos. Es un niño con un importante grado de retraso mental, por lo que no hablaba casi y de lo poco que hablaba tampoco le entendíamos muy bien. Su madre estaba allí y en seguida que entramos se mostró muy dispuesta y colaborativa con nosotras. Nos explicó que Marcos tenía 5 años pero no los tenía de edad mental, que no sabía los nombres de los colores, que no tenia buena motricidad pero que si queríamos lo intentásemos. Nosotras entramos con varios papeles de celofán de distintos colores, el niño se puso tímido por no conocernos y se tapo por completo con las sabanas, su madre le dijo que veníamos a jugar con el y hacer cosas con papeles y recortar como el hacía con su tía, allí el niño asomo la cabeza y su madre nos dijo que se iba fuera para que el niño no se pusiera más tímido con ella allí…

Al niño le gustaba recortar, así que eso estuvimos haciendo un buen rato hasta que se volvió incontrolable por las tijeras, una de nosotras se fue a la habitación de Álvaro y la otra se quedo con Marcos.
A Marcos intentamos enseñarle los colores, que nos pidiera los papeles por su color intentando que repitiera sus nombres, luego haciendo bolas de papel celofán conseguimos entretenerlo creando un muñeco muy básico y también decorando su juguete, pegándole papeles y cinta de carrocero para cambiar la decoración de la casita con la que jugaba.

A Álvaro ya lo conocíamos y el nos recordaba a nosotras también, casualmente es el mismo niño con el que ya habíamos realizado este taller, así que no volvimos a mostrarle el ppt. Y nos pusimos a trabajar directamente con los papeles. El dibujaba con rotuladores sobre el papel celofán de distintos colores, luego lo recortaba o nos pedía a nosotras que lo hiciéramos según la dificultad del dibujo y nos decía donde quería que pegásemos las cosas en su ventana de la habitación.
Álvaro es niño muy despierto, muy estimulado y habla mucho también, por lo que trabajar con el es muy fácil y llevadero.
Ambas experiencias resultaron gratificantes, Álvaro porque trabaja muy bien y le gusta mucho hacerlo y con Marcos aunque no se haya realizado demasiado trabajo, el rato que conseguimos atraer su atención fue bueno, el niño se babeaba y su madre se mostró muy contenta, nos dijo que cuando se babeaba tanto era porque estaba concentrado y que es muy difícil conseguir eso.

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